A. simus tenía la frente baja con los ojos muy separados y hacia adelante, lo que le brinda una excelente visión.Aunque la historia temprana de Arctodus simus es poco conocida, es evidente que se extendió en América del Norte por Kansas (hace unos 800.000 años).Arctodus simus era obligatoriamente carnívoro, y como adulto habría requerido 16 kg de carne al día para sobrevivir.Según algunos autores era un depredador brutal que atacaba a los grandes mamíferos del Pleistoceno, con su gran fuerza física.[1] El oso de hocico corto tenía un esqueleto articulado de una manera que habría permitido giros rápidos, una capacidad necesaria en cualquier depredador que sobrevive matando a ágiles presas.