Apulia y Calabria

[3]​ Eran dirigidas por un gobernador cuyas funciones abarcaban todos los ámbitos excepto el militar: mantenían la ley y el orden, ejecutaban las órdenes de los ámbitos administrativos superiores, administraban la justicia en primera instancia, recaudaban los impuestos y otros ingresos imperiales o del emperador y estaban al cargo del servicio postal así como del mantenimiento de los edificios públicos.

[5]​ Aunque en sus inicios mantuvo los anteriores límites administrativos, sobre el año 337 se le separó el área alrededor de Benevento para añadirla a la vecina provincia de Campania.

Durante esta guerra sufrió bastantes saqueos y devastaciones quedando en un estado tan lastimoso que, en 412, se le redujeron sus impuestos a la quinta parte durante cinco años y en 418, a la séptima parte.

[6]​ La mayor parte de su territorio presentaba una orografía predominantemente llana.

Sus principales ciudades eran: Canusium, la capital provincial, Tarentum, Hydruntum, Brundisium, Barium, Luceria y Asculum Dentro de las calzadas que discurrían por la provincia destacaban la Vía Apia y la Vía Trajana que comunicaban Brundisium y Barium, respectivamente, con Roma.