Antruido

En Crémenes y en La Puerta, hasta la década de los años sesenta del siglo pasado.

Bajo las pieles visten ropa oscura y botas de cuero negro, cruzando sobre toda la indumentaria dos cinturones de los que cuelgan cencerros conocidos tradicionalmente como lloqueros para hacer el mayor ruido posible.

Acompañan esta indumentaria portan vejigas hinchadas de cerdo atadas a palos para golpear a la gente y un cuerno conocido como turullo para acompañar el ruido de los cencerros.

En el año 2015 por primera vez se envasó y comercializó en saquines de un kilo.

En tercer lugar se pondrá sobre la mesa la fuente de barro con las costillas, espinazo, morro, pata, lengua, el chorizo, el tocino, y la oreja, para que cada comensal se sirva a su gusto.

Para terminar, se degusta de postre las manzanas asadas, que era la fruta disponible en estos pueblos.

Durante la primera mitad primer milenio la Iglesia intentó erradicar en varias ocasiones la celebración de mascaradas paganas.