De este matrimonio tuvo dos hijas, María Ignacia e Isabel, ambas murieron célibes.
Al capitular el generalísimo Francisco de Miranda, Briceño emigra hacia Curazao.
Tenía planeado dirigirse hacia Barinas para reunirse con los Briceño Angulo, parientes de él, republicanos.
Sin embargo, es traicionado pues los realistas se enteraron de sus planes, fue interceptado y derrotado en el camino.
Anteriormente ya habían enjuiciado a todos los Briceño Angulo que lo esperaban para formar parte de la causa libertadora.