[1] En 1600 llegó a Cochín, India, con 18 jesuitas más.
En 1624 dejó Agra, donde se cree que aprendió la lengua persa, para dirigirse a Delhi, de donde había oído hablar sobre un fantástico templo llamado Badre situado a unos 40 días desde la India.
Siguiendo a los peregrinos, él y su hermano jesuita Manuel Márquez fueron los primeros europeos en alcanzar el Tíbet,[2] cuando cruzaron el Himalaya a través del paso de Mana, llegando hasta Caparanga, donde fue establecida una misión, la cual duró hasta 1631 cuando su éxito provocó una violenta reacción local.
[3] Volvió al Tíbet en otras dos ocasiones, en 1625 y 1627.
[2] Relató sus tres viajes en sendas cartas, dando así comienzo la primera de ellas: