Se consultaba a amas de casa, por ejemplo.
Eran conversaciones informales en la calle, en la cola del banco, etc.
Esa gente no sabía que era una actividad de inteligencia"[3] La relación que establecieron las Fuerzas Armadas con los medios de comunicación a fin de presentar fusilamientos y asesinatos de personas como “enfrentamientos”, o formar opinión a partir de editoriales de apoyo al régimen, fue establecida en otros juicios de lesa humanidad (como es el caso de la investigación llevada adelante por la Unidad Fiscal Especializada en Derechos Humanos en relación con la responsabilidad de Vicente Massot, miembro de la junta directiva del diario La Nueva Provincia de Bahía Blanca[4] La declaración de Anselmo Palavezzati, que llevó a la defensa del propio Palavezzati a citar como testigo a Raúl Kraiselburd, Director del diario El Día (aunque luego fue desestimada por el mismo abogado) conllevó a la querella de HIJOS -los abogados Ramón Baibiene y Verónica Bogliano- a solicitar al Tribunal durante su alegato en el juicio, que el diario El Día fuera investigado por sus "vínculos" con la Inteligencia del Ejército.
Además de Anselmo Pedro Palavezzati, fueron imputados Antonio Herminio Simón, Emilio Alberto Herrero Anzorena, Ricardo Armando Fernández, Jorge Héctor Di Pasquale, Carlos María Romero Pavón, Gustavo Adolfo Cacivio, Miguel Ángel Amigo y Roberto Armando Balmaceda.
Dada la posición jerárquica que ocupaba Anselmo Palavezzati dentro del Destacamento, resultó inverosímil para el Tribunal Oral Federal N°1 de La Plata aceptar que el tercer jefe de ese Destacamento “ignoraba que la dependencia que dirigía tenía a su cargo semejante lugar, en el que, además, cumplían funciones de guardia sus subordinados es absolutamente absurdo”.