Angiostrongylus cantonensis
[3] Los caracoles son los hospedadores primarios intermedios, donde se desarrollan las larvas hasta que pueden infectar.Los seres humanos son huéspedes incidentales de esta lombriz intestinal y pueden infectarse por la ingestión de larvas en caracoles u otros vectores crudos o poco cocidos, o por agua y verduras contaminadas.[4] Luego, las larvas se transportan a través de la sangre al sistema nervioso central, donde son la causa más común de meningitis eosinofílica, una afección grave que puede provocar la muerte o daño cerebral y nervioso permanente.[5] La angiostrongiliasis es una infección de creciente importancia para la salud pública, ya que la globalización contribuye a la propagación geográfica de la enfermedad.[6][7] Fue inicialmente identificado por el destacado parasitólogo chino Hsin-Tao Chen en 1935, luego de examinar especímenes de rata,[1] el nematodo Angiostrongylus cantonensis fue identificado en el fluido cerebroespinal de un paciente con meningitis eosinofílica por Nomura y Lim en Taiwán en 1944.