[1] Rumanía fue el primer estado de la Europa poscomunista en establecer relaciones oficiales con la Comunidad Europea.
Rumania firmó su Acuerdo Europeo en 1993[2] y solicitó formalmente la adhesión a la UE en 1995.
Junto con la solicitud, Rumania presentó la Declaración de Snagov, firmada por los 14 principales partidos como muestra de su pleno apoyo a la adhesión a la UE.
El objetivo de adherirse a la UE también influyó las relaciones regionales de Rumanía; por ejemplo, el país exige visa a los ciudadanos de varios estados, incluyendo Rusia, Ucrania, Bielorrusia, Serbia, Montenegro, Turquía y Moldavia.
El Comité confirmó la progresión de Bulgaria en materia de preparativos para la adhesión, apuntando que el país debía continuar reformando sus estructuras judiciales y luchar con más contundencia contra la corrupción política, el crimen organizado y el tráfico de personas.