Si el amobarbital se toma durante periodos prolongados, puede desarrollar dependencia fisiológica y psicológica.La abstinencia de amobarbital imita el delirium tremens y puede poner en peligro la vida.Eli Lilly and Company fabricaba el amobarbital en Estados Unidos bajo la marca Amytal en cápsulas azules con forma de bala (conocidas como Pulvules) o comprimidos rosas (conocidos como Diskets)[1] que contenían 50, 100 o 200 miligramos del fármaco.El uso indebido del amobarbital estaba muy extendido y en la calle se le conocía como "cielo azul".En un estudio in vitro en cortes talámicos de ratas, el amobarbital actuó activando los receptores GABA A, lo que disminuyó la resistencia de entrada, deprimió el estallido y el disparo tónico, especialmente en las neuronas ventrobasales e intralaminares, mientras que al mismo tiempo aumentó la duración del estallido y la conductancia media en cloruro individual.Lo más probable es que esto se deba a la pérdida de inhibición.Como tal, el fármaco fue empleado clínicamente por primera vez por William Bleckwenn en la Universidad de Wisconsin para eludir las inhibiciones en pacientes psiquiátricos.Llamó al psiquiatra de Walker, que llegó y le administró amobarbital para sedarle.El actor y comediante británico Tony Hancock se suicidó en Australia en 1968 utilizando esta droga en combinación con alcohol.El personaje del Dr. George Huang (BD Wong) afirma que la droga deja al paciente tan susceptible a la sugestión, que el terapeuta puede implantarle recuerdos falsos.