Ingresó en el convento de San Francisco de Salamanca, donde probablemente realizó sus estudios.
Obtuvo la cátedra de Teología en Oviedo en 1651, y más tarde en Salamanca, donde defendió la Mística ciudad de Dios de la madre Ágreda.
En el capítulo provincial celebrado en Benavente en 1662 fue elegido ministro provincial de la de Santiago, aunque la gobernó poco tiempo, ya que en el capítulo celebrado en Roma en 1664 fue nombrado ministro general de toda la Orden.
No obstante, recibió una dispensa papal de Clemente IX para poder continuar como líder de su Orden hasta 1670.
En 1682 asistió a las víctimas de peste que sufrió su diócesis.