Sus primeros estudios los realiza en el colegio La Salle, donde se gradúa de bachiller.
Durante estos años de su juventud, se dedicó a vender automóviles.
En 1948, otro golpe de Estado tuvo lugar en el país el cual provocó que Oropeza volviera a ser apresado y exiliado.
Finalmente, se residencia en Bolivia donde por su labor realizada en ese país, la Universidad Mayor de San Andrés de La Paz le otorga el título honoris causa.
En 1958 cuando en Venezuela es derrocado el general Marcos Pérez Jiménez, la ONU nombra a Alejandro Oropeza representante especial de las Naciones Unidas en Pakistán, pero este lo rechaza y decide volver a Caracas donde colabora con la creación de la Asociación Pro-Venezuela y funda la editorial Cordillera.