Su padre fue el industrial Thomas Braniff, quien había llegado a México para construir el ferrocarril de Veracruz.
Fue entonces que Alberto pudo adquirir un aeroplano Voissin y recibió instrucción de vuelo del mismo fabricante e inventor francés.
En ese lugar y de forma previsora, Alberto hizo construir el primer hangar, en México.
Por primera vez en Hispanoamérica; un aparato más pesados que el aire; volaba de forma controlada.
Tanto Braniff como su Farman fueron incorporados posteriormente a la Escuadrilla Aérea del Ejército Mexicano.