Sus padres fueron Miguel Lebrija Siurob y María Urtetegui.
Posteriormente fue secretario particular del gerente de la Compañía Mexicana de Luz y Fuerza Motriz.
A partir de ese momento sus vuelos sobre la capital ocurrieron casi sin interrupción.
Fue el primer mexicano que voló sobre la Catedral Metropolitana de la Ciudad de México y el primero en alcanzar alturas superiores a 1000 metros.
El Gobierno Mexicano lo nombró Mayor jefe de la aviación y se le envió a Francia con objeto de adquirir varios aviones para el Ejército Mexicano; desempeñando este encargo tuvo que atenderse de urgencia una lesión en su pierna derecha.