Alberto Antonio era el hijo del conde Luis Gunter I y su esposa, Emilia de Oldemburgo-Delmenhorst.
Alberto Antonio fue tenido en gran estima por el emperador José I.
Su principal razón era su modestia religiosa, centrada en la piedad, que se acentuó con la muerte repentina de su hermana favorita, Ludmila Isabel.
Estuvo motivado por el deseo de desarrollar su país por cualquiera vía posible.
Creó varias fundaciones caritativas con el propósito de facilitar el acceso al conocimiento científico.