Cuando salió libre, volvió a Sallent y no encontró trabajo, razón por la cual tuvo que sobrevivir trabajando como temporero de la vendimia en Francia y albañil ocasional.
Se puede afirmar que no es posible, excepto con una especial destreza, ocasionar tantas lesiones externas respetando las estructuras óseas subyacentes».
[2] El sumario fue cerrado en 1980 pero todos los procesados habían sido puestos en libertad condicional en 1979 por orden de Landelino Lavilla.
[6] Los otros tres encausados fueron condenados a ocho, siete y seis años, respectivamente.
De todos ellos, ninguno llegó a permanecer siquiera 8 meses en prisión.