Agresividad

Se presenta como una mezcla secuenciada de movimientos con diferentes patrones, orientados a conseguir distintos propósitos.Las teorías activas o innatistas consideran que la agresividad es un componente orgánico o innato del individuo, elemental para su proceso de adaptación; desde esta perspectiva se considera que la agresión tiene una función positiva y que la labor de la educación consiste fundamentalmente en canalizar su expresión hacia conductas socialmente aceptables.La adicción a sustancias psicoactivas (popularmente denominadas "drogas") y los cambios emocionales del individuo, tanto a un nivel considerado no patológico por los especialistas en salud mental como a un nivel considerado patológico (neurosis, depresión, trastorno maníaco-depresivo o trastorno bipolar) pueden generar también comportamientos agresivos y violentos.Entre otras muchas consideraciones, las frustraciones generan agresividad porque no es posible conseguir aquello que se desea.La agresividad puede manifestarse en cada uno de los niveles que integran al individuo: físico, emocional, cognitivo y social.La define como "una sensación de disgusto debida a un agravio, malos tratos u oposición.El concepto de persona agresiva hace referencia cuando un individuo toma a mal una opinión aunque sea constructiva por algún problema familiar o psicológico que detona esta actitud.Considerando la existencia de cuatro emociones básicas: alegría, tristeza, miedo y rabia, esta última sería la más próxima a la ira.Cuando se manifiestan en sentido pleno, la rabia es una emoción incompatible sincrónicamente con la tristeza, del mismo modo que lo son entre sí el miedo y la alegría.Al respecto este autor pone un ejemplo en el que el niño puede ser privado de la satisfacción de sus necesidades:El nacimiento de un hermanito, por ejemplo, puede ser un choque terrible en este sentido particular, aun cuando el niño esté preparado para su llegada o aun cuando existan buenos sentimientos hacia el nuevo bebé.La súbita aparición de la desilusión —con respecto al sentimiento infantil de que ha creado a su propia madre— que el advenimiento del nuevo bebé puede provocar, inicia una fase de robo compulsivo (Winnicott, 1986 [1939]: 182).La tendencia antisocial puede manifestarse en conductas como la mentira, el robo, actos destructivos, crueldad compulsiva y perversión.Es decir, un sujeto emite una conducta violenta y si encuentra otra conducta violenta como respuesta incrementa la intensidad de su violencia, que a su vez incrementa la respuesta del otro.