[5] Alemania fue después beneficiada por la Moratoria Hoove y también el Tratado de Lausana por las que Francia y Reino Unido renunciaron a las indemnizaciones que tenía pendientes Alemania.
El acuerdo recogía una quita sobre las deudas privadas alemanas, contraídas tanto en el período anterior a la Segunda Guerra Mundial -que ascendían a 22.600 millones de marcos- como la deuda de la posguerra estimada en 16.200 millones.
[1][8] El cumplimiento de las condiciones impuestas permitió a Alemania entrar en las instituciones económicas internacionales, como el Banco Mundial, Fondo Monetario Internacional y Organización Mundial del Comercio.
Dichas compensaciones nunca han sido canceladas ni perdonadas por los alemanes.
Así, en el año 1964, Alemania logró que tanto el PASOK -socialistas- como Nueva Democracia -conservadores-, reconocieran las deudas históricas y sus intereses.