Inflorescencia ramificada, más raramente simple, recubierta exclusiva y uniformemente de pelos glandulares erecto-patentes, ± densos.
Todas las partes de las plantas del género Aconitum contenienen alcaloides, principalmente aconitina, cuya elevada toxicidad supone un riesgo incluso en cantidades mínimas por sus potentes efectos cardiotóxicos y neurotóxicos.
[5] Aconitum burnatii, fue descrita por Gyula Julius Gáyer y publicado en Magyar Botanikai Lapok 8: 141, en el año 1909.
Este nombre probablemente indicaba una planta venenosa endémica cuyo hábitat era común entre las rocas escarpadas en algunas zonas de Grecia.
Según otras fuentes ( Plinio el Viejo[7]) el nombre Aconitum se deriva de un antiguo puerto en el Mar Negro, llamado "Aconis".