[2] Empleado en algunas ocasiones en la elaboración de ciertos fármacos que se administran en forma líquida (recordando a un zumo de naranja).
Es considerado también un solvente de compuestos tales como la nitrocelulosa, ceras, aceites y otras resinas.
Se usa en la industria alimenticia como saborizante artificial a naranja, principalmente en las bebidas carbonatadas como por ejemplo Fanta.
Para lograr dicho efecto, se emplea el mismo junto con acidulantes como el ácido cítrico y agentes endulzantes como la sacarosa o sustitutos de la misma (estos últimos para regímenes dietéticos).
También se emplea en la elaboración de golosinas, gelatinas, helados, etc.