Absorción (farmacología)

En farmacología, específicamente farmacocinética, la absorción es un término que define el movimiento de un fármaco hacia el torrente sanguíneo.

Más aún, el perfil farmacocinético de la droga puede ser cambiado con facilidad al ajustar los factores que afectan la absorción.

Es indispensable conocer la estructura de la membrana citoplasmática debido a su estrecha e importante relación con la farmacocinética, que implica el pasaje de las drogas a través de las membranas, por ende podemos considerar la farmacocinetica como el proceso que ocurre en el organismo desde la administración del fármaco hasta que es excretado.

En la vía oral el fármaco llega al organismo habitualmente después de la deglución.

Cuando llega el fármaco al intestino delgado cambia el pH luminal y se favorece bastante la absorción pasiva.

De hecho prácticamente todos los fármacos, menos los ácidos y bases fuertes, se absorben a este nivel.

Esta falta de absorción para algunos fármacos se aprovecha para utilizarlos a nivel local (como la neomicina o los laxantes).

La vía parenteral ofrece indudables ventajas sobre la vía oral: permite su uso en pacientes que no pueden o no deben deglutir, permite el uso de sustancias polipeptídicas y otras que se inactivan por los jugos gastrointestinales y evitan el primer paso hepático.