(719) Albert

A partir de ahí, Albert desapareció del cielo sin dejar ningún rastro.

A causa de este error en el cálculo, fue imposible observarlo en 1915 puesto que el asteroide se adelantaba en su órbita 0,15 años o 55 días por cada vuelta al Sol o, lo que es lo mismo, casi 13 días por año.

Con este error, en muy poco tiempo el asteroide se alejaba mucho en la bóveda celeste del lugar previsto por el cálculo.

James V. Scotti, el 6 de mayo, lo observa con magnitud 22,3 en α=11h36m12s18 y δ= 02º55,25”2, todo ello dentro del programa Spacewatch.

Después de su descubrimiento, la siguiente aproximación fue en 1941, muy favorable, pero en esa época el mundo estaba enzarzado en la Segunda Guerra Mundial.