En el ámbito del yoga, se denomina āsana (en sánscrito आसन, pronunciado originalmente /ásana/ pero actualmente también /asána/) a cada una de las distintas ‘posturas corporales’ que tienen como objetivo actuar sobre el cuerpo y la mente.En 1931, el arqueólogo británico sir John Marshall descubrió en Mojensho Daro (Pakistán) el Sello Pashupati realizado en esteatita, posiblemente realizado en el siglo XVII a. C. de la cultura del valle del Indo, con una criatura antropomorfa con cuernos en una posición sentada con las piernas cruzadas.[3] En el Yoga sūtra, Patañjali dice de āsana: prayatna śaithilya ananta samāpattibhyām Aunque admite numerosas interpretaciones, una traducción podría ser: «Āsana debe ser firme y gozosa / el esfuerzo se vuelve no-esfuerzo y se alcanza lo eterno / entonces las dualidades cesan».[5] Las āsanas aseguran un físico fuerte y elástico, pero su efectividad radica en la capacidad para domar la mente mediante la disciplina.Según sus practicantes, solo volcado completamente en la ejecución de una āsana la mente se tranquiliza y «las dualidades cesan».
Fotografía del libro
Mohenjo Daro
and the Indus Civilization
(del arqueólogo británico sir John Marshall; Londres, 1931) que muestra un sello de arcilla de la
civilización del valle del Indo
.
Sālamba sarvāṅgāsana
o «postura de la vela».
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