[7] Un áyivika era un mendigo religioso que seguía las reglas del credo fundado por Gosala (Makkhaliputra); según el Brijat-yataka de Varaja Mijira.
[8] Etimológicamente, áyivaka significa ‘seguimiento de reglas especiales con respecto a la manutención’.
[8] En el Lalita-vistara esta palabra aparece como áyivaka (ājīvaka en AITS), que es etimológicamente más correcta.
Ashoka se enfureció y mandó ejecutar a todos los ayívikas de la región.
[12] Ningún esfuerzo humano puede cambiar el destino: los acontecimientos futuros ya existirían de alguna manera, debido a que están determinados.
[12] Al principio se hallaban relacionados con el budismo y el yainismo, del que quizás fueran incluso una variedad, pues la primera referencia conocida del áyivika se encuentra en los primitivos textos canónicos yainas.
El escritor Pakudha Kachaiana, contemporáneo de Buda, elaboró una teoría atomista con siete sustancias (en orden de sutilidad): tierra, agua, fuego, aire, alegría, dolor y vida, que son increados y constantes.
[12] Los átomos son eternos, indivisibles, indestructibles y no han sido creados por nadie.
El movimiento ayívaka pudo haber continuado existiendo en la India hasta fecha tan tardía como el siglo XIV.
En el sur de la India existen inscripciones del siglo XIII que mencionan a los ayívakas.
No está claro si todos los ayívikas vivían como vagabundos desnudos, o si se trataba de una práctica que solo llevaban a cabo los devotos más vehementes.