A su vez, es considerada, según algunos historiadores, la primera ciudad del mundo.El del oeste forma una elevación menor y hay también un yacimiento bizantino a unos cientos de metros hacia el este.Dichos trabajos están entre los proyectos de excavación más ambiciosos en marcha según, entre otros, Colin Renfrew.El éxito de la excavación ha validado el método posprocesual como un nuevo enfoque que ha creado escuela.La población vivía en casas rectangulares construidas con adobe, adosadas, sin calles ni pasajes entre ellas, apiñadas como si formaran un panal de abejas.Al estar las casas en medianera, se configuraba una especie de muralla defensiva hacia el exterior, sin aberturas.Posiblemente cuando hacía buen tiempo muchas de las actividades diarias se realizarían en las terrazas, que así podrían haber formado un espacio abierto similar a una plaza.Al parecer, en época tardía, en las terrazas se construyeron grandes hornos comunales.Los cuerpos eran plegados al máximo y, a menudo, introducidos en cestos o envueltos en esterillas rojas.Las investigaciones más recientes también revelan poca diferenciación social basada en el género, recibiendo una alimentación equivalente tanto hombres como mujeres y, aparentemente, con un estatus social similar relativo, hecho establecido como propio de las culturas paleolíticas.[8][9][10][11] Las enfermedades más corrientes entre la población del asentamiento fueron la anemia, la artritis y la malaria, endémica en la región debido a unos pantanos cercanos.Un rasgo distintivo de Çatalhöyük son sus estatuillas femeninas: Mellaart sostenía que estas figurillas realizadas esmeradamente en materiales tan diversos como mármol, calizas azules y pardas, esquisto, calcita, basalto, alabastro y arcilla, representaban una deidad femenina del tipo Diosa Madre.Aunque existía también un dios masculino, el número de las figurillas femeninas era muy superior y este dios no aparece realmente hasta después del nivel VI, habiéndose identificado, hasta la fecha, 18 niveles.Habiendo encontrado solamente una figurilla similar al modelo de Diosa Madre que Mellaart propugnaba, entre la gran cantidad de ellas desenterradas, Hodder decidió que el yacimiento no ofrecía suficientes indicios como para establecer si era una cultura matriarcal o patriarcal, sino que apuntaba más bien hacia una sociedad relativamente igualitaria.
Interior de una vivienda restaurada.
Reconstrucción de una habitación de Çatalhöyük con las posiciones originales de los
bucráneos
y un relieve de
cuerpo humano
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Reconstrucción de una habitación de Çatalhöyük con las posiciones originales de los
bucráneos
y el relieve de la
figura humana
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