[1] La mayoría de estas fábricas están situadas en ciudades mexicanas de la frontera con Estados Unidos, principalmente Tijuana, Mexicali, Ciudad Juárez, Reynosa y Heroica Nogales.Debido al aumento de las políticas reguladoras, los impuestos, y las declaraciones financieras en los países desarrollados las empresas mudaron sus industrias hacia lugares que permitirían su evasión, como es el caso de México.[5] La industria maquiladora en México empezó en el año 1942 como un acuerdo entre Estados Unidos y el gobierno mexicano con el incentivo de crear trabajos para los estratos más pobres de México.A partir de 1983, el sector maquilador fue la fuerza impulsora en el nuevo modelo económico.Las mujeres mexicanas trabajan para ganar aproximadamente una sexta parte de lo que se paga en Estados Unidos.[11] Estas maquiladoras se abastecen del país fronterizo, sin embargo lo que usaban como elementos secundarios en el proceso de la manufactura, a menudo el tráfico se interrumpe y esto los obliga a buscar proveedores locales, siendo estos otras maquiladoras que se habían establecido en la frontera con la única función de dar servicio a la maquiladoras.Con el crecimiento del mercado nacional, estos proveedores buscan otras formas de vender en este nuevo territorio que no cuenta con competencia de las grandes compañías.