Loricifera

Estos animales poseen cabeza, boca, tracto digestivo y ano, así como un esqueleto externo en forma de armadura denominado loriga.

Anteriormente se pensaba que no existía registro fósil,[2]​ pero el descubrimiento de Eolorica deadwoodensis en 2017 confirmó que existen desde el Cámbrico.

[3]​ Genéticamente estarían próximos a Kinorhyncha y Priapulida con los que constituirían el clado de los Scalidophora.

[7]​ La boca está situada entre los estiletes del cono bucal, seguida de un tubo bucal alargado que comunica con el bulbo faríngeo, que posee una sección trirradiada (con tres radios) y glándulas salivales extrínsecas.

Posteriormente aparece un esófago que desemboca en un estómago amplio y este a un recto corto hacia el ano.

Imagen microscópica de Spinoloricus teñida con Rosa de Bengala. La barra mide 50 μm.