[3][4][5] Stebbing se educó en James Allen's Girls 'School, Dulwich, hasta que fue, en 1904, a Girton College, Cambridge, para estudiar historia (aunque en Cambridge no otorgaba títulos o membresía universitaria completa a mujeres en ese momento).
[5][3] Posteriormente realizó una maestría en filosofía en la Universidad de Londres en 1912, ggalardonada con distinción.
[3] Stebbing fue ascendida a Profesora en 1933, convirtiéndose así en la primera mujer en ocupar una cátedra de filosofía en el Reino Unido, un evento que fue, como señala Siobhan Chapman, "titular del noticiero".
Stebbing fue discípula de William Ernest Johnson, según John Wisdom, fue influenciada por G.E.
Stebbing seguramente seleccionó sus objetivos con una alegría académica refinada, como, por ejemplo, en su Philosophy and the Physicists (1937).
Los empujes que ella entregó parecen algo duros; tal vez no estaban destinados a soportar.
Pero un día surgirá un 'pontífice' y arrojará un puente a través de los estrechos; cuando eso suceda, el peso de su pensamiento ayudará a anclarlo bien y verdaderamente en su territorio".
[20] En 1930, publica Modern Introduction to Logic que ha sido considerado como un simple libro de texto; sin embargo, es más bien un libro extenso en el que se retoma desde la lógica formal aristotélica, los Principia Mathematica de Russell y Whitehead y al Tractatus de Wittgenstein.
El trabajo más popular de Stebbing es Thinking to Some Purpose (Pensando en algún propósito) (1939), un libro encargado por Pelican Books y descrito en la portada como: "Un manual de primeros auxilios para aclarar el pensamiento, que muestra cómo detectar ilógicidades en los procesos mentales de otras personas y cómo evitarlos en los nuestros".
[23] Tal como apareció en forma impresa (tanto en 1939 como en 1941) se ejecuta, en su totalidad, de la siguiente manera: "Hay una necesidad urgente hoy", escribe la profesora Stebbing, "para que los ciudadanos de una democracia piensen bien.
p. 9 [1952][24] El Capítulo IV se abre así: "Algunas formas de pensamiento ineficaz se deben a nuestro deseo no natural de tener creencias confiadas sobre asuntos complicados con respecto a los cuales debemos tomar alguna acción u otra.
No debemos permitir que nuestros hábitos de pensamiento cierren nuestras mentes, ni depender de palabras clave para salvarnos del trabajo del pensamiento.