Las lecturas del Antiguo y del Nuevo Testamento para la oración diaria se especificaban en formato tabular, así como los Salmos; y los cánticos, en su mayoría bíblicos, que se proporcionaban para ser rezados o cantados entre las lecturas.
[3] Sólo se utilizó durante unos meses, puesto que tras la muerte de Eduardo VI en 1553, su media hermana María I restauró el culto católico.
Tras los tumultuosos eventos que rodearon a la Guerra Civil inglesa, cuando el Libro fue de nuevo abolido, se publicó otra modesta revisión en 1662.
El nombre completo del Libro de Oración Común de 1662 es The Book of Common Prayer and Administration of the Sacraments and other Rites and Ceremonies of the Church, according to the use of the Church of England, Together with the Psalter or Psalms of David, pointed as they are to be Sung or said in churches: And the Form and Manner of Making, ordaining, and Consecrating of Bishops, Priests, and Deacons ("El Libro de Oración Común y Administración de los Sacramentos y otros Ritos y Ceremonias de la Iglesia, según el uso de la Iglesia de Inglaterra, junto con el Salterio o los Salmos de David, señalados tal y como deben cantarse o recitarse en las iglesias: Y la Forma y Manera de Hacer, Ordenar y Consagrar a los Obispos, Sacerdotes y Diáconos").
Varias de las iglesias nacionales que forman parte la Comunión Anglicana, así como las iglesias metodistas, han redactado y publicado sus propias versiones del Libro de Oración Común.