John Amery

Tenía además ascendencia judía pues sus abuelos maternos eran adinerados judíos húngaros que habían emigrado a Gran Bretaña y se habían convertido al protestantismo, pero ocultó ese origen familiar para que su ascenso político no fuera turbado por el antisemitismo de la clase alta británica.Esta tarea no dio los frutos esperados y por tanto Amery empezó a buscar reclutas entre los prisioneros de guerra británicos encerrados en diversos campos de detención, pero allí encontró apenas a dos voluntarios.Su hermano, Julian Amery, había intentado fraguar documentos para alegar que John Amery había adquirido la nacionalidad española y al ser España un país neutral en la lucha no habría ocurrido legalmente un acto de traición.Este alegato no fue aceptado y sus abogados le aconsejaron declararse mentalmente enfermo.Amery reiteró su declaración y por tanto fue condenado a morir en la horca, tras apenas ocho minutos de audiencia judicial.