Yacimiento arqueológico de L'Ereta dels moros

Por los hallazgos realizados el área que se conoce pertenecería a la parte privada de la villa.

Una escultura tallada en mármol blanco que representa a este dios romano, cubierto solamente con la piel de ciervo y unas sandalias y acompañado de la pantera, animal asociado a esta divinidad.

En 1924, su hijo se vio en la misma situación que años antes su padre, encontrando la mitad superior.

Se puede observar en ella, una figura humana masculina, que parece portar una toga, además de adivinarse unos rasgos caligráficos en la parte superior del fragmento.

El yacimiento se encuentra muy deteriorado, ya que lleva utilizándose como explotación agraria durante, al menos, el último siglo.