Wingfoot Express
El Wingfoot Express fue un vehículo a reacción construido por Walt Arfons y Tom Green, diseñado para batir el récord de velocidad en tierra.[1][2] Arfons y Green se conocieron en 1962, durante una feria comercial celebrada en Gary, Indiana.Según recuerda Arfons, "Bastaron diez minutos para ponernos a planear nuestro asalto al récord mundial de velocidad en tierra".Green puso un considerable énfasis en optimizar la aerodinámica, minimizando el coeficiente de arrastre y, especialmente, reduciendo al máximo el área frontal del vehículo estrechando el eje delantero y utilizando ruedas más pequeñas.Sus cálculos mostraban que el reactor Westinghouse J46 tenía potencia sobrada para poder alcanzar las 400 millas por hora (640 km/h).Sin embargo, su propio diseño podría lograr las 480 mph (770 km/h), el mismo objetivo que se había marcado Breedlove.Las ruedas frontales estaban montadas dentro de la carrocería, apenas superando el ancho del motor, mientras que las ruedas traseras estaban colocadas en voladizo y expuestas al aire (en versiones posteriores se redujo su diámetro, y se carenaron).Arfons, un experimentado piloto de dragsters, era la persona designada para conducir el Wingfoot Express."Solo los 100 m de valla metálica que se habían enredado en sus ruedas traseras consiguieron pararlo", según Green.Al llegar a este punto, no quedaba tiempo para encontrar otro conductor, y fue Green, quien no había conducido por encima de las 130 millas por hora (210 km/h) en su vida, la elección más lógica debido a su familiaridad con la mecánica del vehículo.En 1964, el Wingfoot Express regresó de nuevo a Bonneville durante una semana, pero el motor no recuperaba la fuerza mostrada en sus anteriores carreras para adquirir velocidad.