Con 13 años se enroló como voluntario de primera clase en el buque insignia del Almirante Cornwallis en la flota del Canal; en 1806 se convirtió en aspirante a oficial y, en 1810, fue ascendido a teniente en la fragata Alexander, que pasaría los tres siguientes años protegiendo la pesca de ballenas en el archipiélago de las Svalbard.
En agosto llegaron a Lancaster Sound y siguieron al norte, delimitando la bahía Melville, en la parte más septentrional, hasta ese momento desconocida por el Almirantazgo.
Llegaron hasta el Smith Sound (la boca del estrecho de Nares), pero no siguieron más allá, al confundir Ross un espejismo o una cadena de icebergs con unas montañas en el extremo del estrecho, llegando incluso a bautizarlas como «Crocker Hills».
John Barrow, entonces secretario del Almirantazgo británico planeó dos expediciones más al Ártico para el años siguiente.
Debieron orientarse mediante navegación celeste, y, en los días en que el cielo no estaba despejado, solamente auxiliados por la dirección de los cambiantes vientos.
Expediciones posteriores lograron culminar el recorrido estableciendo así el Paso del Noroeste.
Parry, después siguió la costa de la península de Melville hacia el norte, reconociendo las diferentes bahías y ensenadas que pudieran esconder el posible paso hacia el oeste.
Exploró y cartografió el extremo sur de la península y luego continuó al Lyon Inlet (que fue nombrado en honor de su segundo oficial, el comandante George Francis Lyon).
Se habían mejorado el sistema de calefacción para evitar la acumulación de humedad en las cabinas y las tradicionales literas habían sido sustituidas por hamacas para permitir una mayor circulación del aire.
Los inuit contaron a Parry que existía un estrecho al norte de la isla Winter que permitía llegar a aguas abiertas en el oeste, y su esperanza de encontrar el Paso del Noroeste creció.
Hicieron reconocimientos a pie aunque no lograron encontrar mar abierto.
Parry, sin embargo, estaba convencido ese invierno de que no podrían alcanzar ya el estrecho de Bering, ya que las provisiones se les estaban acabando.
No logró encontrar el pasaje hacia el Pacífico, pero había cartografiado y explorado un área considerable del Ártico, hasta ese momento desconocida, que se extendía desde la isla de Southampton, al norte, hasta la isla de Baffin.
En la lucha contra el hielo el HMS Fury encalló y quedó gravemente dañado.
[5] Alcanzó el rango de contraalmirante en 1852, y al año siguiente se convirtió en gobernador del Greenwich Hospital, cargo que ocupó hasta su muerte.
La personalidad de Sir Edward Parry tuvo una fuerte componente religiosa, con una fe inquebrantable en Jesucristo.