[1] Muchos científicos lo situaron entre los Reptiliomorpha, que es un grupo hermano de los primeros amniotas.
El reducido tamaño lo hizo un fósil clave en la búsqueda de los amniotas más primitivos, ya que se cree que los huevos amnióticos evolucionaron en animales muy pequeños.
[4][5] Los rasgos avanzados que lo vinculan más con los reptiles que con los anfibios incluyen los huesos del tobillo sin fusionar, la carencia del repliegue laberintodonte de la dentina, la ausencia de la muesca ótica y un cráneo generalmente pequeño.
(2003) interpretaron que el largo cuerpo y las patas pequeñas eran posibles adaptaciones para excavar, similares a las vistas en los actuales escincos.
Esta denominación fue eventualmente latinizada y se convirtió en el nombre de la especie, lizziae.