Warner Lambert era una corporación con presencia a nivel mundial, que hasta la década de los 80 se había manejado como una empresa multinacional.
Con los años, la compañía se expandió a través de muchas fusiones y adquisiciones para convertirse en un competidor internacional en varios negocios.
En 1976, Warner-Lambert se hizo cargo de Parke-Davis, que fue fundada en Detroit en 1866, por Hervey Parke y George Davis.
A finales de los años 90, Warner-Lambert formó una alianza con Pfizer para llevar su droga, Lipitor, al mercado.
Dos Años después, Warner-Lambert migró del país y concluyó su historia como empresa internacionalmente, tras los ya mencionados acuerdos millonarios con Pfizer.