Se distingue por ser el primer as de combate en alcanzar la marca de 250 victorias.
El alto mando alemán le prohibió volar en misiones de combate, por miedo a perder semejante héroe aéreo.
Es, para muchos, el mejor piloto de caza de la historia, teniendo en cuenta la elevada relación entre misiones de combate y victorias (0.58 victorias por misión).
El joven Walter se unió a la Luftwaffe en octubre de 1939, siendo entrenado en la Jagdfliegerschule 5 (Escuela para pilotos de caza N.º 5), cerca de Viena.
Tras finalizar su entrenamiento como piloto de caza, el flamante teniente fue asignado a la 9./JG 54[1] en febrero de 1941, asignado al Frente Oriental