Asunción de María

A finales del siglo IV, Epifanio de Salamina escribió que no podía encontrar ninguna tradición autorizada sobre cómo terminó su vida.[10]​ La primera referencia literaria conocida sobre la Asunción se encuentra en la obra griega De Obitu S. Dominae del siglo IV o V.Si bien no tenían ni tienen carácter histórico, la Iglesia católica vio en estos escritos un fondo teológico que existía y del cual los relatos eran expresiones adornadas.La fiesta de la Dormición fue decretada en Constantinopla por el emperador Mauricio en el año 600 d. C.; unos cincuenta años después se introdujo en Roma y se menciona en un decreto del papa Sergio I (687-701), que fijó una procesión para la fiesta,[7]​ y su nombre cambió a Asunción en algunos calendarios litúrgicos del siglo IX.En el siglo XII apareció el tratado Ad Interrogata, atribuido a san Agustín, el cual aceptaba la asunción corporal de María.En su obra Visio de risinge beate virginis Mariae relató cómo María fue asunta en cuerpo y alma al cielo.El papa Pío V, en el siglo XVI, al momento de reformar el Breviario, quitó las citas del Pseudo-Jerónimo y las sustituyó por otras que defendían la asunción corporal.
Retablo mayor de la catedral de Nuestra Señora de la Asunción de Zacatecas, México .