El vero es el segundo forro más común en Heráldica, después del armiño.
Se denomina a veces veros ordinarios a un tipo de veros (categoría que agrupa varios tipos de forros).
Para un escudo completo, la descripción heráldica tradicional es: "Los veros se expresan en armería, como copas, o campanas pequeñas alternadamente en seis filas de plata, y azur".
Para su construcción, el "manual heráldico" informa que se realizan de la siguiente manera: "se hace dividiéndole en los seis pies de longitud, y cinco de latitud, subdividiendo después cada cuadrado en 16 partes iguales por tres líneas perpendiculares y otras tantas horizontales, paralelas entre sí, formando en la perpendicular del centro a su extremo superior A, un ángulo recto que sus líneas AB y AC, corten diagonalmente los dos cuadrados superiores del centro, de cuyos puntos se tiran las paralelas BD y CE, desde la línea primera de puntos horizontal, hasta la última, y a sus extremos tírense otras dos diagonales DF y EG en los cuadrados de los ángulos inferiores del rectángulo, y quedará formada la figura, continuado seguidamente, la misma operación en los restantes del escudo".
Se encuentran así, aunque raramente, vero (o verado) billeteado, acanalado, en escamas, encajado, nuboso, ondulado (la menos rara), potenzado...Estas formas no parecen constituir una característica determinante de identificación y parecen estar más ligados a modos de representación según los lugares y/o las épocas.