En 1919, organizó protestas pacíficas contra la violencia racial de aquel verano.
[1][2] En la mayoría de los casos los disturbios se debían a que las personas de etnia blanca atacaban a los afroamericanos.
En algunos casos, la población de afroamericanos respondió con fuerza a los ataques, especialmente en Chicago, donde, junto a Washington D. C. y Elaine (Arkansas) se produjo el mayor número de víctimas mortales.
Además, durante esta época, existían fuertes enemistades entre los afroamericanos y los inmigrantes europeos que rivalizaban por el trabajo en las principales ciudades estadounidenses como Nueva York, Baltimore, Boston o Filadelfia[4].
En una época de fuertes protestas laborales, muchos industriales utilizaron a los negros como esquiroles, lo que aumentó el resentimiento.