Vega de Río Palmas

En algunas zonas todavía se practica la agricultura en terrazas.

Dado que la figura muestra elementos estilísticos franceses, se supone que los conquistadores de la isla trajeron la figura desde Normandía.

Por miedo a los ataques piratas, fue escondida en el cercano barranco de Malpaso y redescubierta años más tarde por casualidad por los monjes franciscanos San Diego de Alcalá y Juan de Santorcaz.

El siglo XVII supuso la consolidación del lugar como núcleo poblacional, coincidiendo con el inicio de la decadencia de Betancuria, la antigua capital de la isla, que comienza a perder población a favor de los núcleos poblacionales vinculados a las zonas más productivas de Fuerteventura, manteniendo su carácter agrícola y ganadero hasta la actualidad.

Durante esta última, peregrinan fieles desde todos los puntos de la isla para rendir tributo a la patrona majorera.