Vasili Perov

Perov se dedicó a la pintura real o realista y crítica.

Despedida del Difunto: el conjunto de los personajes sube con lentitud un repecho, en una composición donde la diagonal descendente confiere gran dramatismo.

Troika: tres niños cansados y con frío arrastran un trineo con un barril lleno de agua por una calle invernal.

La Última Taberna a la Entrada de la Ciudad: otra vez la cuesta, la diagonal, la nieve, y los trineos; en otro cuadro de clave baja y poco colorido.

La pintura lo muestra a sus 51 años como un hombre maduro e introspectivo.