La vaporización vaginal es una práctica en donde la vulva se expone a vapor caliente infusionado con plantas medicinales.
[6] La práctica consiste en hervir agua, colocarla luego en un contenedor y agregar hierbas medicinales, como manzanilla (Chamaemelum nobile), artemisa (Artemisia vulgaris), ajenjo (Artemisia absinthium), albahaca (Ocimum basilicum), romero (Salvia rosmarinus), orégano (Origanum vulgare) o caléndula (Calendula officinalis).
[4][8][14] Está contraindicada para mujeres gestantes, con candidiasis, que se encuentran en tratamiento de fertilidad asistida y menstruando.
[14] También se recomienda controlar la temperatura del vapor para evitar quemaduras o escaldaduras en un lugar tan sensible.
[14] Además es importante seleccionar una planta que no genere reacciones alérgicas en la persona usuaria,[8] considerar una cantidad apropiada de la planta y no utilizar aceites esenciales debido a su alta concentración de metabolitos secundarios que podría causar irritaciones en el área.