La balneoterapia (del latín balneum, "baño") es un conjunto de terapias o tratamientos destinados a curar enfermedades o conservar la salud, que habitualmente se realizan en balnearios.
Las aguas minerales de los balnearios suelen ser ricas en ciertos minerales (sílice, sulfuro, selenio, radio) que se pueden absorber a través de la piel.
Se emplean también a menudo las arcillas medicinales, cuya práctica recibe el nombre específico de "fangoterapia".
Esto se debía a las deficiencias farmacomedicinales del momento, ya que casi todas las enfermedades sin tratamiento específico se trataban con una cura termal.
[1] Sin embargo hay indicaciones de que esta técnica ya era practicada antiguamente por los griegos y los romanos y otros pueblos.