En cambio, la teoría del valor subjetivo, sostenida actualmente por la casi totalidad de las escuelas y tendencias liberales, no considera relevante el concepto y lo ha dejado mayormente de lado, fundamentalmente debido a que no existe en dicha teoría una diferencia importante entre valor de uso (utilidad) y valor de cambio (costo).
Este "algo común" que a su vez debe ser un "algo mensurable" (medible) no puede ser una propiedad natural de las mercancías; ésta solamente se tiene en cuenta en el valor de uso.
Lo único que tienen en común es ser útiles y haber sido creadas por trabajo humano.
Para poder reducir el objeto a una misma expresión o proporción, se tiene en cuenta solamente la cantidad de trabajo humano que contiene dicho objeto, sin tener en cuenta los componentes físicos o químicos del mismo.
Recién teniendo en cuenta todos estos requisitos podemos determinar la magnitud de valor.