Sus especies principales son: El contagio se produce por la ingestión de carne porcina, infestada por larvas de este parásito enquistadas en células musculares o paredes grasas que se transforman en células nodrizas, donde vive el parásito.
Estas larvas cambian a estado adulto en el intestino delgado de quien ha realizado la ingesta.
El ciclo tiene una duración mínima (prevalencia) de unas tres semanas, pero puede prolongarse dado que las larvas pueden resistir toda la vida del animal.
La patología cardíaca, la neumonitis y, en menor medida, la encefalitis son las principales causas de muerte por triquinosis.
[2][3][4] No hay un tratamiento específico para la triquinosis una vez que las larvas han invadido los músculos.
[6][7] La esterilización con rayos gamma de los productos cárnicos mata al parásito y a sus quistes.
Métodos como ahumar, secar y salar la carne no son confiables para prevenir esta infección.