La coalición que conformó el gobierno estuvo formada por los partidos Likud, Judaísmo de la Torá, Shas, Kulanu y la Casa Judía.Como tal, las partes deben adherirse a los acuerdos realizados con el primer ministro cuando se formó la coalición.Asimismo, el ministro de Asuntos Religiosos no tendrá control sobre los asuntos relacionados con la conversión al judaísmo; que estarán bajo la supervisión de la oficina del primer ministro.[4] El acuerdo también estipulaba que todas las obligaciones y compromisos asumidos para aumentar instituciones jaredí tendrán que venir del Ministerio de Finanzas y no del Ministerio de Educación.Los miembros del partido Likud anticipan posibles adiciones a la coalición, entre ellos la del miembro del Likud Gilad Erdan, que no aceptó la posición ministerial que se le ofrecía por Netanyahu y Avigdor Lieberman, cuyo partido Yisrael Beitenu decidido no unirse a la coalición.