El objeto de esta convención era la firma de la paz (hecho que ambos lados buscaban) y luego un intento de cambio de prisioneros que no fue posible debido a que los dirigentes porteños habían fusilado a todo prisionero del bando del caudillo.
[1] En diciembre de 1997, los restos del edificio donde se firmara este tratado fueron declarados Lugar Histórico Nacional.
[2] Al ganar Bartolomé Mitre la batalla de Pavón, Justo José de Urquiza le cede la victoria bajo la promesa de respetarle su feudo entrerriano para así imponer su hegemonía sobre todo el país y acabar con los federales.
La carta fue tomada en tono de provocación por parte del general Peñaloza, y por eso el General Taboada ataca en Catamarca, Sandes en La Rioja y Arredondo en San Luis.
También acude el ejército nacional con los jefes mitristas: Rivas, Sandes y Arredondo.