Sin embargo, esta acción conduciría a una larga guerra entre turcos y persas.
En el frente meridional -Irán Occidental-, los otomanos capturaron Tabriz, Urmia, Jorramabad y Hamadán.
Pero el avance otomano comenzaría a verse obstaculizado tras la toma del poder por el sah safávida Tahmasp II.
Mientras su general Nader Kan lideraba a las tropas en el este, Tahmasp lanzó una irreflexiva campaña de la cual salió completamente derrotado y perdiendo Armenia, Georgia oriental, Shirvan y Hamadán.
Durante el reinado de Nader Shah, la Persia afsárida recuperaría estos territorios.