Tratado anglo-irlandés

El Tratado anglo-irlandés fue el tratado entre el Gobierno británico y la República irlandesa por el que se puso fin a la guerra anglo-irlandesa y se estableció el Estado Libre Irlandés.

[1]​[2]​ Entre los signatarios que representaban al gobierno británico se encontraba David Lloyd George, que era el jefe de la delegación, mientras que la delegación de la República Irlandesa estaba encabezada por Michael Collins y Arthur Griffith.

Según las cláusulas del tratado, debía ser ratificado por los miembros de los parlamentos británico e irlandés ('House of Commons of Southern Ireland').

El Estado Libre Irlandés que creaba el tratado entró en vigor el 6 de diciembre de 1922 por proclamación real,[2]​ una vez que su constitución había sido aprobada por el parlamento provisional de Irlanda del Sur y el Parlamento británico.

En relación con el Tratado, Winston Churchill desempeñó un doble papel en el gabinete británico.

Página de firmas del Tratado anglo-irlandés.
Página de un borrador del Tratado, con notas de Arthur Griffith.