Trago corto

En coctelería, un trago corto es una bebida alcohólica preparada de tamaño pequeño.

A diferencia de un trago largo, que tiene mayor cantidad de mixer y se bebe lentamente, el trago corto se bebe relativamente más rápido, o incluso «de un trago».

[1]​ Otra diferencia es que suele tener un sabor más fuerte a alcohol, pues está menos diluido.

[2]​ El trago corto puede no ser un cóctel necesariamente, puesto que hay algunos que no están mezclados, como por ejemplo los chupitos.

Algunos ejemplos son: los aguardientes «en las rocas» (sin mixer, solos con hielo), como el Negroni, también algunos cócteles tipo Sour, como el Pisco Sour, el Daiquirí o el Kamikaze, además de los julepes, los ponches de huevo (como el rompope o el eggnog), los fix (tragos cortos con jugos de frutas) y por supuesto, los chupitos, que pueden ser de algún licor, orujo, pacharán, mezclados, machacados...[3]​ Por su tamaño, el trago corto cumple principalmente dos funciones: como aperitivo/digestivo o como veloz embriagador, ya que cuando el alcohol se encuentra menos diluido y su consumo es más rápido, la sangre lo absorbe antes.

Negroni , un trago corto.