[3] Este verbo hacía referencia al tripalium, una herramienta parecida a un cepo con tres puntas o pies que se usaba inicialmente para sujetar caballos o bueyes y así poder herrarlos.[cita requerida] Así mismo, de forma coloquial recibe los nombres «curro»[6], «faena»[7]y «tajo» (en España), «laburo» (en Argentina y Uruguay),[8] o «chamba».[cita requerida] La valoración social positiva del trabajo surge de forma gradual.En la Encyclopédie dirigida por Diderot y d'Alembert en el siglo XVIII, en el contexto cultural de la Ilustración, el trabajo es definido como una ocupación a la que el hombre «está condenado por su necesidad», pero de la cual, al mismo tiempo, dependen «su serenidad, su buen juicio y quizás su virtud».[10] En general los grandes sociólogos (Comte, Weber, Durkheim) concedieron al trabajo un lugar central en sus teorías.Pero, es recién a partir de la Segunda Guerra Mundial que se desarrolla una sociología del trabajo.Conceptos claves de la Sociología como los de “división del trabajo”, “clase social”, “estratificación social”, “conflicto”, “poder”, “población económicamente activa”, “sobretrabajo”, “subocupación demandante y no demandante”; “mercado laboral”.
Trabajo en el
Tahuantinsuyo
. Desde el origen mismo de la humanidad, la labor se ha conformado como una actividad social.
Trabajador estadounidense de comienzos del siglo
XX
.